A pesar de las evidencias del gobierno, defensa de sobrinos de CIlia Flores insiste en que les tendieron una trampa

Por Maibort Petit
@maibortpetit

Los abogados defensores de Efraín Antonio Campo Flores y Franqui Francisco Flores de Freitas, sobrinos de la pareja presidencial venezolana, Nicolás Maduro y Cilia Flores, reiteraron ante la Corte del Distrito Sur de Nueva York que los acusados fueron secuestrados por agentes de los Estados Unidos en Haití, ya que los agentes que actuaron en el operativo no se identificaron ni llevaron el arresto de acuerdo a lo establecido en las leyes. Asimismo, recalcaron que el gobierno norteamericano preparó un trampa para que los dos jóvenes pudieran ser enjuiciados por un delito que les fue inculcado.
En la respuesta de los abogados de Campos Flores y Flores de Freitas a la fiscalía propusieron nuevamente que la corte realice una audiencia de prueba que les permita discutir ante el juez las mociones previas al juicio que buscan entre otras cosas eliminar de las pruebas obtenidas durante el arresto de los imputados.
La audiencia de prueba fue fijada a solicitud de la fiscalía el 8 y 9 de septiembre de 2016.

Para los abogados de Campos Flores y Flores de Freitas es necesaria una explicación coherente acerca de la recopilación de pruebas por medio de las cuales se acusa a sus clientes, para poder tener una visión clara sobre los alegatos presentados por el gobierno y hacer una defensa efectiva de los acusados.

Igualmente, consideran que es inaceptable la actitud de la Fiscalía que pretende suministrar las traducciones y documentos en el momento en que ellos lo estimen oportuno, sin tomar en cuenta que el español es un idioma complejo por los numerosos giros idiomáticos que posee, los cuales hay que analizar con sumo cuidado, con el agravante que muchas pruebas provienen de grabaciones defectuosas y de mala calidad. 

Insisten en que necesitan de suficiente tiempo para analizar toda la documentación y evaluar las traducciones que conforman parte de la acusación.

También solicitan la supresión de la evidencia en base a una (expoliación) por parte del gobierno. Según los abogados los agentes de la DEA habrían eliminado la cocaína y los guantes de látex que supuestamente habría usado Efraín Antonio Campo Flores en una grabación sin haber sido examinados por un laboratorio. 

Del mismo modo, la defensa de los sobrinos de Nicolás Maduro y Cilia Flores quieren saber la identidad de los informantes confidenciales y que se proporcione más información basado en la solicitud del proyecto conocido como Ley de Particulares.

Los abogados defensores de Campo Flores y Flores de Freitas protestan la descontextualización de las circunstancias de los acusados, por ejemplo, limitándose a alegar que se trata de dos hombres jóvenes que gozan de buena salud, pero desestiman las denuncias de que habían sido sometidos a estar sin comida ni agua durante los largos interrogatorios. En este mismo sentido, refieren que la fiscalía sostiene que los acusados tienen altos niveles de educación, llegando Campo Flores a tener estudios en Derecho, pero no toman en cuenta que desconoce el funcionamiento del sistema judicial de Estados Unidos. 

La defensa argumenta que sus clientes fueron sometidos a coacción por parte de los agentes de la DEA al momento de hacer sus declaraciones iniciales durante el arresto en Haití y la misma no fue voluntaria, por lo que deben ser desestimadas. Apelan al caso United States vs. Taylor sobre las implicaciones que en estado mental de las personas tienen la coacción.

La defensa exige que se determine con exactitud previo inicio del juicio, cuándo fueron detenidos Efraín Antonio Campo Flores y Franqui Francisco Flores de Freitas por la policía de Haití y en qué momento fueron transferidos a la custodia de la de DEA. Requieren que se determine si las autoridades haitianas actuaron bajo la dirección de la agencia antidrogas estadounidense. 

Asimismo, piden saber exactamente cuándo los acusados dieron su declaración a la DEA y por qué no fueron presentados ante el juez disponible más cercano en los plazos establecidos por la ley. Para la defensa fueron violados y alterados todas las prescripciones que hace la ley acerca de la presentación de los acusados ante las autoridades judiciales. Asimismo cuestionan los procedimientos que se siguieron para la detención de Campo Flores y Flores de Freitas, pues se violó lo que establece la ley al respecto. Tienen dudas también sobre el proceso de extradición desde Haití de los imputados. Sostienen que hay inconsistencias en la cronología de los acontecimientos presentada por la fiscalía.

La defensa de los sobrinos de Cilia Flores y Nicolás Maduro insiste en la necesidad de realizar una audiencia previa al juicio para establecer todos estos asuntos, al tiempo que alegan que sus defendidos han sido víctimas de expoliación informativa, algo que niega rotundamente el gobierno.

Para los abogados de Campo Flores y Flores de Freitas es inaudito que uno de los principales testigos sea una persona conocida como “El Sentado”, quien fue asesinado en Honduras en diciembre de 2015.

Rematan que ese testigo cooperador actuó en el extranjero sin supervisión y sin el adecuado manejo de las pruebas. Ponen en tela de juicio la credibilidad de los tres informantes confidenciales a los que habría recurrido el gobierno para levantar el caso por narcotráfico contra los sobrinos de Nicolás Maduro y Cilia Flores.

Se cuestiona el proceso por el cual se inculpa a Campo Flores y Flores de Freitas toda vez que, a juicio de la defensa, no existe una prueba concreta que demuestre la culpabilidad los señalados que permita establecer una relación directa de la cocaína con los acusados. Y por ello, al parecer de los abogados, recurren a los informantes.

Insisten en la realización de una audiencia preliminar que les permita desestimar los alegatos del gobierno y establecer la validez de la carga de la prueba presentada por el gobierno.

La defensa quiere que se aclare en qué circunstancia murió el informante confidencial asesinado en Honduras en diciembre de 2015.

Las pruebas usadas para incriminar a los sobrinos de la pareja presidencial, según los abogados defensores, fueron manejadas inadecuadamente o son inconsistentes. Insisten en saber en qué circunstancias, patrones y esquemas de supervisión los informantes confidenciales manejaron la supuesta droga. 

Los abogados descalifican la supuesta manipulación de la droga que habría hecho Efraín Campo Flores.

Los abogados defensores refieren que Efraín Campo Flores manifestó no estar en capacidad de hacerse de la cantidad de droga que los informantes alegan que estos pretendía traficar, además de afirmar que dijo no tener los medios ni la experiencia necesaria en el tráfico de drogas para hacer una operación de la envergadura señalada por el gobierno.

A lo largo del escrito la defensa cuestiona permanentemente las pruebas gráficas como fotografías y grabaciones de audio y de video, bien por inexistentes, por inconsistentes, por defectuosas o por alteración de las mismas. 

Por otra parte, la defensa asegura que Campo Flores y Flores de Freitas no han sido debidamente informados y exigen les sea entregada una lista de los datos manejados por la acusación en contra de sus clientes. 

Cuestionan que al momento del juicio la fiscalía solo pretenda presentar una historia de los acontecimientos que supuestamente sucedieron según la versión del gobierno, sin que esto cuente con el respaldo debido que pruebe la culpabilidad de Campo Flores y Flores de Freitas

Por lo tanto, estiman que el gobierno debería ser obligado a proporcionar un informe de datos que describe con mayor precisión los cargos contra los acusados para que puedan prepararse debidamente y comprender las sanciones que pudieran enfrentar.

Sostienen que estos datos permitirán entender la naturaleza del caso, la teoría manejada por el gobierno que, a juicio de la defensa, luce sumamente turbia. Sostienen que es imprescindible determinar cuándo, dónde y con quien se produjo la supuesta conspiración de los acusados para importar narcóticos a los Estados Unidos. 

Los abogados exigen todos estos datos, documentos e información para poder sustentar la defensa de los acusados con todas las garantías otorgadas por la Constitución de los Estados Unidos y las leyes. 

Una y otra vez exigen las pruebas que sustentan la acusación del gobierno, toda información relacionada con la investigación, procesamiento o detención de los demandados, pormenores de las reuniones, las transcripciones manejadas por la fiscalía en donde, consideran, se pone de relieve la mala calidad de los videos y archivos de audio, usados para imputar a Efraín Antonio Campo Flores y Franqui Francisco Flores de Freitas.